En el proceso de publicación de un libro hay varios agentes involucrados y entre ellos se encuentra la importante figura de la editorial.
Tradicionalmente, el autor es el que genera el contenido, la persona que escribe el libro, y la editorial es la empresa o entidad que compra los derechos de la obra (mediante un contrato editorial) para poder comercializarla, ya sea en formato físico, digital o audio.
·Ejemplos de editoriales de libros
·¿De qué se encarga la editorial de un libro?
·Qué se hace en una editorial de libros al recibir un manuscrito
·Qué hace la editorial de un libro antes de publicar una novela
¿Quieres ejemplos de editoriales de libros? ¡Pues tenemos un montón! En nuestra web hemos recopilado muchísima información sobre editoriales para que sepas un poco más sobre su historia, qué libros publican, cómo contactar con ellas, si convocan premios literarios…
Las editoriales son las encargadas de convertir el manuscrito del autor en un libro. Si hablamos en términos empresariales (pues las editoriales no son otra cosa que una empresa), la función de las editoriales es transformar una materia prima (una historia) en un objeto comercializable (un libro). Esto lo hacen sometiendo el manuscrito a una corrección de estilo y ortotipográfica, maquetándolo, diseñándole una portada (o una cubierta entera) y mandándolo imprimir o preparándolo para su publicación online. Además, la editorial también se puede encargar de darle publicidad a la obra, organizar firmas de libros, cerrar entrevistas, mandar notas de prensa a los medios, preparar book-trailers y merchandising… pero eso ya depende de la implicación de la editorial con el proyecto y, actualmente, en muchos casos es el autor el que debe moverse e implicarse para dar a conocer su obra.
Por otro lado, una función más de la editorial puede ser la de asesorar al autor sobre su obra. La editorial puede sugerir modificaciones al manuscrito en caso de que considere que algo falla en la historia o que algún aspecto es mejorable, pero es el autor el que tiene la última palabra sobre las modificaciones, pues la obra es de su autoría y, al firmar un contrato con una editorial, se están cediendo los derechos de explotación, no los derechos de modificación de la obra.
Asimismo, y en un paso previo a los anteriormente mencionados, la editorial es la encargada de filtrar las propuestas editoriales que le llegan, valorando si tienen calidad suficiente para aparecer en su catálogo, si son obras vendibles y si siguen su línea editorial. Si cualquiera de estos factores falla, descartarán la obra (descubre cómo elegir editoriales a las que enviar tu manuscrito). Esto es importante puesto que muchas personas «confían» en el criterio de una editorial y si un libro de su catálogo les ha gustado, son más propensos a comprar otro del mismo sello, confiando en su criterio editorial.
¿Te gustaría saber qué es lo que hace una editorial cuando recibe una obra? Imaginemos que eres un autor novel (o poco conocido) que envía su manuscrito junto con una propuesta editorial a la empresa editora de sus sueños. Como siempre soñamos a lo grande, la editorial a la que le has mandado tu obra es una de las potentes, con muchos departamentos y numerosos trabajadores, y por ello lo más normal es que tu novela no llegue directamente al escritorio (o la bandeja de correo) del editor que después te contactará si están interesados en publicar tu obra.
Entonces, ¿qué hace una editorial de libros al recibir una nueva propuesta? Pues, para empezar, una persona revisa por encima la obra para descartar todas aquellas que tengan faltas de ortografías evidentes o no encaje con su línea de trabajo (te sorprendería la cantidad de personas que mandan obras de narrativa a editoriales que solo publican poesía, o, por ejemplo, obras históricas a editoriales especializadas en novela contemporánea). Esta criba inicial se realiza con las primeras hojas del manuscrito y con la propuesta editorial (donde deberías haber incluido un resumen pormenorizado de la obra).
Si tu obra encaja en el catálogo y no tiene faltas de ortografía flagrantes, una persona de la editorial (puede ser un editor o no) empezará a leer el manuscrito. Hay varios editores que afirman que les basta con leer las tres o cuatro primeras páginas para saber si la novela les interesa o no. El estilo, la ambientación, los personajes… el primer capítulo dice muchísimo de cualquier obra.
Tras una primera lectura completa y viendo que la novela puede tener potencial, el siguiente paso es que el editor con el que después trabajarás lo lea, aunque en ocasiones se manda a lectores profesionales externos a la editorial (no están en plantilla, sino que cobran por proyectos). Estos lectores editoriales hacen un análisis exhaustivo de la obra y crean un informe para el editor.
En caso de que haya un lector profesional en medio, el último (en ocasiones penúltimo) eslabón de la cadena es cuando la novela por fin llega a la persona que va a decidir si la novela le gusta o no, si es interesante para la editorial o no. Hasta ahora todo eran cribas: descartar lo malo y quedarse con lo que era aceptable. Ahora llega la hora de, con los informes creados por los lectores externos y la perspicacia del editor, decidir si esa novela se publica o no. Y hemos escrito que en ocasiones es el penúltimo paso porque, si la editorial es grande, debe haber una reunión de departamento donde los distintos editores se juntan para decidir qué obras (que ya han pasado todos los filtros) se publican y cuáles no.
Hay novelas muy buenas, que encajan en la editorial, y al final no se publican porque ya han publicado libros de la misma temática, el autor no es lo suficientemente conocido, en ese momento buscan otra cosa…
Todos estos pasos se refieren a editoriales grandes, pues la realidad es que existen editoriales pequeñas (tan pequeñas que solo tienen uno o dos trabajadores), donde la persona que abre por primera vez el documento con tu novela es la que va a decidir si publica tu obra o no.
Resumiendo qué hace una editorial al recibir un manuscrito:
Te sorprendería todo el trabajo que hacen las editoriales antes de mandar a imprenta tu novela.
Supongamos que tú ya les has mandado la versión definitiva de tu obra (que es lo más normal) y que quieren publicártela. Tras firmar el contrato editorial, los engranajes de edición se ponen en marcha y un corrector empieza a leer tu manuscrito.
De esta forma, unos meses antes de la publicación el escritor recibe las correcciones para que las revise y les dé el visto bueno. Si el autor está de acuerdo con todas las modificaciones (sí, lo recomendable es leer la obra de nuevo, prestando atención a las notas del corrector), el proceso de edición del libro continúa y la siguiente ocasión en que la editorial se pone en contacto con el escritor es para enviarle las galeradas. Las galeradas son un archivo digital de cómo se verá la obra cuando se publique en formato ebook o se imprima en formato físico.
La revisión de galeradas es el último paso, pues la próxima vez que el autor relea lo que ha escrito será cuando el libro ya esté publicado y ahí ya no se podrán hacer modificaciones.
De forma paralela a la corrección y maquetación del libro, la editorial trabaja en la portada y la sinopsis, así como en el plan de marketing.
¿No sabes cómo buscar la editorial de un libro en un ejemplar físico o digital? Normalmente, en el exterior del libro aparece el logotipo de la editorial que lo publica, pero en el interior de la obra puedes descubrir mucho más, ¡incluso la dirección de la editorial!
Para ello solo tienes que abrir el libro y pasar la página del título. Antes de la dedicatoria (si la hay) y en página impar, encontrarás toda la información del libro: autor, edición, derechos, ISBN, dónde ha sido impreso, etc. Ahí puedes encontrar también la información de la editorial que publica la obra.
Te ponemos un ejemplo de cómo aparece la editorial dentro de un libro: