En Seúl, una mujer asiste a clases de griego antiguo. Su profesor le pide que lea en voz alta pero ella permanece en silencio; ha perdido la capacidad del lenguaje, así como a su madre y la custodia de un hijo de ocho años. Su única esperanza de recuperar el habla es mediante el aprendizaje de una lengua muerta.
El profesor, que acaba de regresar a Corea después de pasar media vida en Alemania, se encuentra dividido entre dos culturas y dos lenguas. También él afronta pérdidas: su vista empeora irreversiblemente a cada día que pasa, y convive con el miedo de saber que, cuando llegue la ceguera total, perderá toda autonomía.
Con una belleza inusitada, las voces íntimas de estos dos protagonistas se intercalan y se cruzan en un momento de desesperación. ¿Será posible que encuentren en el otro el modo de salvarse, que la oscuridad dé paso a la luz y el silencio a la palabra?
Han Kang (1970) es una escritora surcoreana que en 2024 fue galardonada con el premio Nobel de Literatura.
La primera obra de Han Kang se publicó en 1995 “El amor en Yeosu”, aunque antes había publicado poemas en revistas literarias. Desde sus inicios ha cosechado buenas críticas a todos los niveles, y en 1999 su libro “El niño Buda” fue Premio de Novela Coreana.
Gran parte de su obra permanece inédita en español, aspecto que está cambiando con su nombramiento como Premio Nobel.